Un ejecutivo de una compañía de seguros en Vigo que cobra 2.400 euros, ingresa mensualmente una pensión alimenticia fijada por sentencia para la manutención de sus hijos de 500 euros. Hoy está en paro y, con 56 años, cobra 900 euros al mes. Ahogado por facturas y tras recortar de aquí y allá llega a la conclusión de que los números no cuadran. Las cuentas no salen. Y, aconsejado por su abogado, decide ir al juzgado. Solicita una "modificación de medidas"; el tecnicismo jurídico con el que se conoce la revisión de las condiciones del divorcio. Es un caso de carne y hueso del que habla un jurista gallego para ejemplificar el meteórico aumento de estos asuntos. En los Juzgados de Familia lo confirman. "Tenemos constantemente, en el último trimestre, registramos 35 casos solo en el Juzgado número 5", confiesan en los tribunales. Esto es, uno cada dos días en cada Juzgado.Lee toda la noticia AQUI
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