Uno de los invitados del recientemente celebrado I Congreso Internacional sobre la Inmigración y la Diversidad Cultural, ha sido el filósofo y sociólogo Giovanni Sartori, galardonado con el Premio Príncipe de Asturias de las Ciencias Sociales 2005. En la conferencia de clausura del Congreso, organizado por la Junta de Castilla y León en Salamanca, Sartori ha propuesto que los inmigrantes que no se integren en la sociedad a la que llegan puedan ser expulsados y que, con procedimientos legales, se pueda establecer la figura de la 'ciudadanía revocable'.
El pensador italiano consideró que conceder una 'ciudadanía con condiciones y revocable' podría ser un 'freno óptimo' a la oleadas migratorias actuales, mientras que autorizar 'una ciudadanía fácil y gratuita es una solución estúpida'. Sostuvo que 'la ciudadanía regalada después de algunos años de permanencia en el territorio, es una mala mezcla de demagogia y estupidez' y afirmó que los inmigrantes clandestinos son 'aprendices que no entienden nada de los problemas que están provocando'.
Sartori aseguró que 'la variable cultural es la decisiva' en el tema de la integración porque 'los inmigrantes no son todos iguales para quienes los acogen, son desiguales, no tiene mucho sentido usar reglas iguales para todos', aunque reconoció que dicha afirmación 'puede ser considerada como discriminatoria'.
El sociólogo afirmó que algunos inmigrantes 'son cercanos, como los iberoamericanos para España', pero otros 'son distantes', en referencia a los africanos y concretamente a los que profesan la fe del Islam, que están 'acostumbrados a que la religión engloba toda la vida'.
Para el filósofo italiano 'el Islám es una religión mucho más fuerte que el cristianismo y todas las demás' y aseguró que 'nosotros entendemos muy poco o casi nada de lo que tenemos entre manos', para posteriormente explicar que 'la mezquita no es sólo un lugar de culto, sino el lugar donde el creyente es adoctrinado sobre lo que debe creer, es su Iglesia y su Estado, es lo que le protege en tierra de infieles', detalló.
Ese mismo pensamiento lo aplicó a 'cuando se quiere permitir colegios islámicos separados' en occidente y reiteró que 'la integración tiene una pequeña oportunidad de éxito si los hijos de musulmanes van a colegios públicos, se mezclan e interactúan con otras culturas'.
A su juicio, las 'esperanzas de la integración se confían a la escuela pública' y defendió la 'contención de las escuelas de adoctrinamiento islámico, que son las mezquitas'.
Frente a la tesis integradora del multiculturalismo, Sartori abogó por defender el pluralismo como la mejor forma de integración, ya que 'respeta las identidades culturales que encuentra y combate las identidades inventadas o recreadas por el multiculturalismo ideológico'. Además, añadió que el pluralismo 'no se plantea ningún objetivo religioso, sino que sostiene la libertad de religión y se asienta mejor en los países con varias religiones'.
Sartori hizo mucho hincapié sobre la importancia de la religión a la hora de integrarse en una sociedad de acogida y explicó que 'una religión crea problemas cuando es invasiva o se vive con particular intensidad pero no al contrario'. El pensador italiano explicó a los periodistas, antes de su intervención, que en la actualidad los políticos europeos y americanos 'no entienden nada de la inmigración' y aseguró que sólo 'hablan entre ellos y ni siquiera tienen tiempo para leer el periódico' desarrollando 'un sistema que refuerza la estupidez'. Posteriormente, Sartori aseguró que los políticos 'no saben que el árabe no conoce los conceptos que derivan de nuestra civilización' y a su juicio, el inmigrante 'islámico no quiere integrarse en el mundo europeo'.
Fuente: minutodigital.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario