Más de un año después de la entrada en vigor de la ley del tabaco, el humo sigue presente en la vida de los españoles. Uno de cada tres ciudadanos mayores de 16 años se declara fumador, según el avance de datos de la Encuesta Nacional de Salud 2006 que hizo público ayer el Ministerio de Sanidad y Consumo. Con respecto ala última encuesta, realizada en 2003, el número de adictos a la nicotina tan sólo ha descendido un punto. Sin embargo, el Ministerio no ha tardado en anunciar que no admite comparaciones con respecto al texto anterior, ya que «se han efectuado cambios metodológicos».
Según el informe actual, realizado con la colaboración del Instituto Nacional de Estadística (INE), un 27 por ciento de los fumadores enciende a diario un pitillo y un 2,9 por ciento lo hace de forma ocasional. Un 21,1 por ciento dice ser ex fumador. Por sexo, el 32,2 por ciento de los hombres y el 22, 1 por ciento de las mujeres se reconocen adictos al tabaco.
En cuestión de peso, los españoles tampoco salen bien parados, ya que la mitad de los adultos ( el 52 por ciento) sufre exceso. El 44,4 por ciento de los varones y el 30,3 por ciento de las mujeres de 18 y más años sufren sobrepeso y la sexta parte de población tiene problemas de obesidad. Con respecto a 2003, el porcentaje de obesidad ha aumentado en dos puntos.
Según el informe actual, realizado con la colaboración del Instituto Nacional de Estadística (INE), un 27 por ciento de los fumadores enciende a diario un pitillo y un 2,9 por ciento lo hace de forma ocasional. Un 21,1 por ciento dice ser ex fumador. Por sexo, el 32,2 por ciento de los hombres y el 22, 1 por ciento de las mujeres se reconocen adictos al tabaco.
En cuestión de peso, los españoles tampoco salen bien parados, ya que la mitad de los adultos ( el 52 por ciento) sufre exceso. El 44,4 por ciento de los varones y el 30,3 por ciento de las mujeres de 18 y más años sufren sobrepeso y la sexta parte de población tiene problemas de obesidad. Con respecto a 2003, el porcentaje de obesidad ha aumentado en dos puntos.
Fuente: La Razón.es
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