La consejera de Justicia, Evangelina Naranjo, ha asegurado que «la Justicia funciona y sigue un proceso ordenado y riguroso», por lo que ha pedido orden a los que la critican ya que, a su juicio, están dando «una imagen equivocada al ciudadano». En una entrevista, la consejera ha criticado «el despropósito de lo que está ocurriendo y la imagen que se está dando al ciudadano» con manifestaciones públicas de los máximos representantes judiciales, incluido el presidente del Tribunal Superior andaluz, Augusto Méndez de Lugo, en el sentido de que la Justicia «no funciona» y de que hay que cambiar el sistema.
Las declaraciones de Navarro se producen después de que el líder del PP-A Javier Arenas anunciara que llevará al Parlamento la «falta de respeto de la Administración andaluza hacia las decisiones de la Justicia». Arenas aseguró que en la próxima sesión de control planteará preguntas relativas a esta cuestión, suscitada a raíz de la sentencia que reconoce a unos padres el derecho a tener una plaza escolar en el colegio concertado que deseen.
Mala imagen
Tras estas críticas, Naranjo reclamó «un poco de orden» a la vez que reconoció tener parte de culpa «porque entre todos le estamos haciendo un flaco favor a la Justicia y estamos dando al ciudadano una sensación de que la Justicia no funciona», reiteró. Y continuó: «Todos somos culpables de esa imagen que estamos dando al usuario, que acude al juzgado, ve unas instalaciones que no son las adecuadas y todo ello le transmite la idea de que no le van a atender bien», agregó.
Naranjo dijo que el problema es que en España en estos 30 años de democracia ha habido que atender lo urgente, «y la Justicia se ha ido quedando ahí». Por ello, reconoció que hay que «dar un repaso» y modernizar esta administración con nuevos órganos, más medios y más jueces, mejorar las infraestructuras, agilizar los trámites, tener aplicaciones informáticas «adecuadas a los tiempos que corren» y un nuevo modelo de gestión de la oficina judicial.
Del mismo modo, la consejera se mostró partidaria de abreviar los tiempos de incorporación cuando se produzcan bajas y de mejorar la formación de los funcionarios destinados a este trabajo».
Reforma «compleja»
«Después de 30 años de democracia, los procesos judiciales no se han reformado», señaló Naranjo. Destacó que esa reforma depende de cuatro estamentos: el Consejo General del Poder Judicial, en el que además cada juez es un poder en sí mismo, la Fiscalía, el Ministerio de Justicia y la Junta. Por ello, hizo hincapié en la necesidad de poner orden «entre las cuatro patas que tenemos que montar esta mesa».
La consejera aseguró que comparte las declaraciones del ministro de Justicia, Mariano Fernández Bermejo, en el sentido de que esta tiene que ser la legislatura de la Justicia, «que marque un antes y un después», pero añadió que «en Andalucía no vamos a esperar a las grandes reformas nacionales».
Fuente: ideal.es
Las declaraciones de Navarro se producen después de que el líder del PP-A Javier Arenas anunciara que llevará al Parlamento la «falta de respeto de la Administración andaluza hacia las decisiones de la Justicia». Arenas aseguró que en la próxima sesión de control planteará preguntas relativas a esta cuestión, suscitada a raíz de la sentencia que reconoce a unos padres el derecho a tener una plaza escolar en el colegio concertado que deseen.
Mala imagen
Tras estas críticas, Naranjo reclamó «un poco de orden» a la vez que reconoció tener parte de culpa «porque entre todos le estamos haciendo un flaco favor a la Justicia y estamos dando al ciudadano una sensación de que la Justicia no funciona», reiteró. Y continuó: «Todos somos culpables de esa imagen que estamos dando al usuario, que acude al juzgado, ve unas instalaciones que no son las adecuadas y todo ello le transmite la idea de que no le van a atender bien», agregó.
Naranjo dijo que el problema es que en España en estos 30 años de democracia ha habido que atender lo urgente, «y la Justicia se ha ido quedando ahí». Por ello, reconoció que hay que «dar un repaso» y modernizar esta administración con nuevos órganos, más medios y más jueces, mejorar las infraestructuras, agilizar los trámites, tener aplicaciones informáticas «adecuadas a los tiempos que corren» y un nuevo modelo de gestión de la oficina judicial.
Del mismo modo, la consejera se mostró partidaria de abreviar los tiempos de incorporación cuando se produzcan bajas y de mejorar la formación de los funcionarios destinados a este trabajo».
Reforma «compleja»
«Después de 30 años de democracia, los procesos judiciales no se han reformado», señaló Naranjo. Destacó que esa reforma depende de cuatro estamentos: el Consejo General del Poder Judicial, en el que además cada juez es un poder en sí mismo, la Fiscalía, el Ministerio de Justicia y la Junta. Por ello, hizo hincapié en la necesidad de poner orden «entre las cuatro patas que tenemos que montar esta mesa».
La consejera aseguró que comparte las declaraciones del ministro de Justicia, Mariano Fernández Bermejo, en el sentido de que esta tiene que ser la legislatura de la Justicia, «que marque un antes y un después», pero añadió que «en Andalucía no vamos a esperar a las grandes reformas nacionales».
Fuente: ideal.es
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