El futuro de los cooperantes españoles secuestrados por Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI) depende de la rama de la organización terrorista que los tenga retenidos. Según aseguran fuentes mauritanas consultadas, AQMI se ha separado en dos tendencias que operan de forma distinta, tienen fines diferentes y utilizan métodos alejados entre sí.
“Lo más probable es que los rehenes se encuentren en el norte de Mali, pero hay dos probabilidades: que estén custodiados por el ala más radical o que se encuentren bajo la custodia del ala más moderada; los grados de peligrosidad dependen del tipo de ala que les tenga atrapados”, explican las citadas fuentes.
La rama menos radical está liderada por Mukhtar Belmukhtar, alias Belaouar (el tuerto). Según las fuentes, lo mejor para el futuro de los tres cooperantes sería estar en manos de este grupo. La razón es que se trataría de mercenarios, más que terroristas, aunque tuvieran una relación más o menos estrecha –depende de la organización concreta– con la madre Al Qaeda. Estos mercenarios tendrían fines exclusivamente económicos.
Por lo tanto, no pedirían previsiblemente contrapartidas políticas (la retirada de las tropas de Afganistán, la desocupación de Ceuta y Melilla o el intercambio de presos islamistas). “Habría una petición de entre cinco y diez millones de dólares, aunque pueden producirse rebajas durante las negociaciones. España, apuntan las mismas fuentes, “no va a poner en peligro la vida de sus rehenes y pagará”. Esto, añaden, “nos hace pensar en que posiblemente luego se produzcan más secuestros y esto se convierta en un gran negocio en el Sáhara”. Si los secuestrados están atrapados por el ala radical, la cosa cambia. Esta rama está liderada por Abdulhamid Abu Zaid, alias Yahya Jwadi, y es conocido por llevar a cabo reivindicaciones de tipo ideológico.
Fuente: Gaceta.es
“Lo más probable es que los rehenes se encuentren en el norte de Mali, pero hay dos probabilidades: que estén custodiados por el ala más radical o que se encuentren bajo la custodia del ala más moderada; los grados de peligrosidad dependen del tipo de ala que les tenga atrapados”, explican las citadas fuentes.
La rama menos radical está liderada por Mukhtar Belmukhtar, alias Belaouar (el tuerto). Según las fuentes, lo mejor para el futuro de los tres cooperantes sería estar en manos de este grupo. La razón es que se trataría de mercenarios, más que terroristas, aunque tuvieran una relación más o menos estrecha –depende de la organización concreta– con la madre Al Qaeda. Estos mercenarios tendrían fines exclusivamente económicos.
Por lo tanto, no pedirían previsiblemente contrapartidas políticas (la retirada de las tropas de Afganistán, la desocupación de Ceuta y Melilla o el intercambio de presos islamistas). “Habría una petición de entre cinco y diez millones de dólares, aunque pueden producirse rebajas durante las negociaciones. España, apuntan las mismas fuentes, “no va a poner en peligro la vida de sus rehenes y pagará”. Esto, añaden, “nos hace pensar en que posiblemente luego se produzcan más secuestros y esto se convierta en un gran negocio en el Sáhara”. Si los secuestrados están atrapados por el ala radical, la cosa cambia. Esta rama está liderada por Abdulhamid Abu Zaid, alias Yahya Jwadi, y es conocido por llevar a cabo reivindicaciones de tipo ideológico.
Fuente: Gaceta.es
No hay comentarios:
Publicar un comentario