El Ejecutivo regional quiere transformar los juzgados de Plaza Castilla en un conjunto residencial para poder financiar parte de las obras del futuro Campus de la Justicia. El Gobierno de Esperanza Aguirre ha concluido que ésta es una de las pocas alternativas que tiene para poder conseguir recursos que le permitan concluir las obras de la Ciudad de la Justicia que se está levantando en el desarrollo de Valdebebas.
La Comunidad de Madrid, según algunas fuentes, ya ha pedido al Ayuntamiento de la capital que estudie la recalificación de los terrenos sobre los que se levantan los juzgados de Plaza Castilla. El suelo, en este caso, pasaría de dotacional a residencial. El Consistorio, de momento, no se ha pronunciado, pero desde el Ejecutivo regional se confía en el visto bueno de Gallardón.
El objetivo, según cálculos de la Comunidad, es obtener por esta macro-manzana judicial unos ingresos de 300 millones de euros. El Gobierno de Aguirre espera conseguir otros 100 millones por la venta de otras sedes judiciales repartidas por varios puntos de la capital. Esos 400 millones -«como máximo»- que se sacarían con la venta de los edificios se destinarían íntegramente a la construcción del Campus de la Justicia de Valdebebas.
Pero hasta aquí sólo conseguiría solucionarse un mínimo problema. El segundo son las cuentas, ya que el presupuesto que existe para construir todo el proyecto alcanza los 1.400 millones de euros. Fuentes de la Consejería de Presidencia, Justicia e Interior achacan este desfase entre ingresos y gastos a la mala planificación que se realizó en sus orígenes. «No es cuestión de empezar a buscar culpables -apuntan-, pero hasta hace poco se nos decía que el Campus lo íbamos a poder financiar íntegramente con lo que obtuviéramos con la ventas de las sedes judiciales. La realidad es bien distinta».
Contra las cuerdas
La crisis económica tampoco ayuda a buscar nuevas soluciones a corto plazo. Podría decirse, entonces, que el Gobierno autonómico necesita otros 1.000 millones de euros para rematar el Campus. De lo contrario, uno de los proyectos estrella del Ejecutivo de Esperanza Aguirre podría verse seriamente comprometido.
Este contratiempo, apuntan desde la Consejería, unido a la mala situación económica por la que atraviesa el país, ha obligado a sus rectores a «ralentizar» la segunda fase de las obras. 2011 ya no es la fecha en la que está previsto que el complejo entre en funcionamiento. La primera fase se dio por concluida hace unos meses cuando terminaron de adjudicarse los proyectos arquitectónicos de los quince edificios que componen el Campus de la Justicia.
De todos ellos, sólo en cinco se ha puesto la respectiva primera piedra: el Juzgado de Menores, la Audiencia Provincial, el Tribunal Superior de Justicia de Madrid, la Central de Producción Térmica y el Instituto de Medicina Legal. Éste último es, sin embargo, el único en el que han comenzado de verdad las obras. El ritmo de los trabajos era bueno... hasta que el arquitecto del proyecto, Alejandro Zaera, solicitó a la Comunidad incrementar el presupuesto de la obra para cambiar el proyecto.
Obras paralizadas
El Gobierno de Aguirre se negó en rotundo, el arquitecto, entonces, optó por abandonar la dirección del proyecto, y el Ejecutivo lo demandó por incumplimiento de contrato. Toda esta polémica ha llevado a que las obras del edificio se hayan paralizado.
¿Cuál es entonces la agenda del Campus para los próximos meses, ante esta situación? El objetivo de la Consejería de Justicia, Presidencia e Interior que dirige Francisco Granados es concentrarse en los próximos meses en abordar las obras de urbanización del desarrollo y, por otro lado, conseguir los permisos municipales para comenzar la construcción de los otros cuatro edificios en los que ya se han colocado las primeras piedras.
Aunque no quieren entrar en ningún tipo de polémicas, desde la Comunidad se lamentan de que el Ayuntamiento de Madrid todavía no les haya dado los permisos para iniciar la construcción de estos inmuebles.
El objetivo es avanzar por este camino. Lo demás tendrá que demorarse. Esto no significa que el proyecto vaya a paralizarse, pero en la Puerta del Sol, ahora mismo, existen otro tipo de prioridades. «Hay planes mucho más importantes en la región. Las políticas de Educación y Sanidad están por delante de este proyecto. No podemos gastarnos una millonada en el Campus de la Justicia cuando para esta legislatura, por ejemplo, tenemos el compromiso de construir cuatro nuevos hospitales en Carabanchel, Collado Villalba, Torrejón de Ardoz y Móstoles», apuntan desde el Ejecutivo autonómico.
Fuente: ABC.es
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