Dos meses después de que el Gobierno regional asumiera las transferencias en materia de justicia, el Ejecutivo se enfrenta a una huelga indefinida que en su primera jornada prácticamente paralizó la actividad en el sector. Más de un centenar de juicios fueron suspendidos ayer con motivo del paro, según fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Cantabria, y un centenar de funcionarios se concentraron ante la sede del Gobierno regional en señal de protesta.Las diferencias retributivas constituyen el único escollo que separa a funcionarios y Administración Regional. Y eso después de que de forma masiva los funcionarios rechazaran en asambleas la última oferta puesta sobre la mesa en la tarde noche del lunes por el consejero de Presidencia y Justicia, Vicente Mediavilla.
El Gobierno ofreció a los sindicatos CC OO, UGT, STAJ y CSI-CSIF una subida salarial del complemento específico (el único que pueden negociar las comunidades autónomas, porque el salario fijo lo determina la Ley de Presupuestos Generales del Estado) de 350 euros al mes en cuatro años, frente a los 200 euros iniciales que puso sobre la mesa.
Actualmente este complemento está situado en 224 euros (oficiales), 203 (auxiliares) y 196 (agentes), con lo que la propuesta promovida por Justicia supondría un incremento medio del 69 por ciento. Además Justicia flexibilizó su postura respecto al cumplimiento del horario, que fue admitida por los representantes sindicales.
Tras cinco horas de negociación, y cuando faltaban tan sólo diez minutos para las diez de la noche y para el comienzo del segundo 'cara a cara' televisado entre Rajoy y Zapatero, Mediavilla dijo que se trataba de su «última propuesta; no hay más, con huelga o sin ella», aseguran fuentes sindicales.
Los representantes de los funcionarios, que reclaman un incremento de 500 euros hasta 2011, consideraron dicha oferta «fronteriza con lo aceptable», pero se encontraron con el rechazo casi unánime cuando ayer expusieron a los funcionarios la propuesta.
En Santander, de los 250 trabajadores que asistieron a la asamblea celebrada en el Palacio de Justicia de Las Salesas, sólo 12 votaron en contra de la huelga, una imagen que los medios de comunicación gráficos no pudieron obtener por expresa prohibición de la autoridad judicial.
Las mismas fuentes precisaron que los ánimos estaban «muy calientes». Algunas organizaciones sindicales han venido caldeando el ambiente desde el 1 de enero con una petición de 900 euros de incremento salarial, una «barbaridad», según otras. Pero la ecuación de que transferencia es igual a una mejora retributiva importante ha calado entre los funcionarios.
La propia Consejería de Presidencia y Justicia cifró en un 60 por ciento el seguimiento del paro en la primera jornada de huelga indefinida, porcentaje que desciende en Castro Urdiales y en los Juzgados de la región.
Justicia aseguró que de los 650 empleados que hay en el sector en Cantabria, ayer únicamente fueron a trabajar 260, «superándose ampliamente los servicios mínimos decretados por el Gobierno regional». Sin embargo, los sindicatos tildaron de «abusivos» estos servicios.
Concentraciones
Ratificada la huelga, los trabajadores se concentraron ante la sede del Gobierno regional, donde protagonizaron una pitada que se prolongó quince minutos. Como complemento al paro, los funcionarios acordaron concentrarse todos los días, de lunes a viernes, ante el Gobierno regional y la Dirección General de Justicia, con sede en el Paseo de Pereda número 36, entre las once y las once y media de la mañana. Además, a partir de las diez celebrarán diariamente asambleas permanentes informativas.
Fuente: eldiariomontanes.es
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