Según un informe del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), los tribunales de la provincia acumulaban un total de 29.533 asuntos en trámite a finales de marzo, lo que representa un 5,8 por ciento más de expedientes que el cuarto trimestre de 2008.
Sin embargo, este incremento no es el más alarmante. Si los datos se comparan con los de marzo del ejercicio anterior, el aumento de casos es, cuanto menos, preocupante, de un 21,8 por ciento. Así, a finales del primer trimestre había la friolera de 5.000 procedimientos más pendientes que en el mismo periodo del año anterior.
Los juzgados de lo Civil son los que arrastran una mayor pendencia, según se desprende de los datos del CGPJ. Así, marzo se cerró con 14.809 asuntos de esta jurisdicción tramitándose. Y sólo en esos tres meses ingresaron 8.355 causas, de las que se resolvieron 6.929.
En los órganos de lo Penal la situación no está mucho mejor. Al final del citado periodo se quedaron pendientes 11.594 procedimientos.
De hecho, el colapso de estos juzgados es más que evidente, Así, los magistrados de estos órganos se están viendo obligados a señalar juicios para el año que viene, como es el caso del número 4, que ya tiene fijada en la agenda de 2010 -en concreto, para abril y mayo de ese ejercicio- la celebración de las vistas orales de varias causas.
Según manifestó el juez decano de Córdoba, Luis Rabasa, «no tenemos ningún interés en dilatar en el tiempo los procedimientos; tan sólo nos ajustamos al volumen de asuntos».
Y es que el número de causas que entran en estos juzgados está muy por encima de sus capacidades. Como muestra, los cuatro órganos de lo Penal de la capital -el quinto entró en marcha el pasado día 30 de diciembre- tenían a finales de 2008 2.500 ejecutorias pendientes sobre la mesa, de las más de 4.200 que ingresaron entre enero y septiembre, según el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía. Lo que se traduce en cerca de mil por titular. Unas cifras que duplican con creces los módulos recomendados por el Consejo General del Poder Judicial.
Rabasa advirtió de que la situación va de mal en peor. Y es que, según el magistrado, que también es titular del Juzgado de Menores, «cada vez tenemos que señalar los juicios más tarde, por el volumen de trabajo».
Otro órganos
Siguiendo con las estadísticas del CGPJ, la jurisdicción contencioso-administrativa registraba a finales de marzo de este año 1.847 asuntos a la espera de su preceptivo fallo; en los juzgados de los Social, la cifra de expedientes era de 1.283.
En lo que respecta a la ejecución de las sentencias, el panorama no es más alentador. Entre enero y marzo se dictaron en todos los órganos judiciales de la provincia 4.681 fallos judiciales, de los que se llegaron a resolver 4.278. El nivel de respuesta sería más o menos efectivo si no se tuvieran en cuenta los más de 21.000 procedimientos en trámite a final del periodo que los juzgados arrastran de otros ejercicios.
Fuente: ABC.es
Sin embargo, este incremento no es el más alarmante. Si los datos se comparan con los de marzo del ejercicio anterior, el aumento de casos es, cuanto menos, preocupante, de un 21,8 por ciento. Así, a finales del primer trimestre había la friolera de 5.000 procedimientos más pendientes que en el mismo periodo del año anterior.
Los juzgados de lo Civil son los que arrastran una mayor pendencia, según se desprende de los datos del CGPJ. Así, marzo se cerró con 14.809 asuntos de esta jurisdicción tramitándose. Y sólo en esos tres meses ingresaron 8.355 causas, de las que se resolvieron 6.929.
En los órganos de lo Penal la situación no está mucho mejor. Al final del citado periodo se quedaron pendientes 11.594 procedimientos.
De hecho, el colapso de estos juzgados es más que evidente, Así, los magistrados de estos órganos se están viendo obligados a señalar juicios para el año que viene, como es el caso del número 4, que ya tiene fijada en la agenda de 2010 -en concreto, para abril y mayo de ese ejercicio- la celebración de las vistas orales de varias causas.
Según manifestó el juez decano de Córdoba, Luis Rabasa, «no tenemos ningún interés en dilatar en el tiempo los procedimientos; tan sólo nos ajustamos al volumen de asuntos».
Y es que el número de causas que entran en estos juzgados está muy por encima de sus capacidades. Como muestra, los cuatro órganos de lo Penal de la capital -el quinto entró en marcha el pasado día 30 de diciembre- tenían a finales de 2008 2.500 ejecutorias pendientes sobre la mesa, de las más de 4.200 que ingresaron entre enero y septiembre, según el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía. Lo que se traduce en cerca de mil por titular. Unas cifras que duplican con creces los módulos recomendados por el Consejo General del Poder Judicial.
Rabasa advirtió de que la situación va de mal en peor. Y es que, según el magistrado, que también es titular del Juzgado de Menores, «cada vez tenemos que señalar los juicios más tarde, por el volumen de trabajo».
Otro órganos
Siguiendo con las estadísticas del CGPJ, la jurisdicción contencioso-administrativa registraba a finales de marzo de este año 1.847 asuntos a la espera de su preceptivo fallo; en los juzgados de los Social, la cifra de expedientes era de 1.283.
En lo que respecta a la ejecución de las sentencias, el panorama no es más alentador. Entre enero y marzo se dictaron en todos los órganos judiciales de la provincia 4.681 fallos judiciales, de los que se llegaron a resolver 4.278. El nivel de respuesta sería más o menos efectivo si no se tuvieran en cuenta los más de 21.000 procedimientos en trámite a final del periodo que los juzgados arrastran de otros ejercicios.
Fuente: ABC.es
No hay comentarios:
Publicar un comentario