Unos abuelos paternos han logrado que un juez les conceda un amplio régimen de visitas periódicas para poder estar con sus tres nietos, a los que no ven desde hace casi dos años, cuando los ancianos y los padres de los pequeños se pelearon y rompieron su relación y vinculo familiar.En la sentencia, el titular del juzgado de primera instancia número 6 de Rubí (Barcelona) estima que no se pueden impedir "sin causa justa" las relaciones personales de los abuelos con sus nietos, ya que los abuelos "desempeñan un papel fundamental de cohesión y transmisión de valores en la familia, fomentando la protección integral del menor".
Por ello, el juez establece en su sentencia -que todavía no es firme ni se ha empezado a aplicar porque ha sido recurrida-, un amplio régimen de visitas periódicas para que los abuelos paternos puedan estar con sus nietos. El juez ha adoptado esta decisión pese a que la Fiscalía -que no se presentó en el juicio-, elaboró un informe contrario a esta medida, que también era desaconsejada por expertos en el ámbito de la familia del Departamento de Justicia de la Generalidad.
En concreto, el juez establece en su sentencia que en los fines de semana, de forma alternativa, los abuelos se podrán quedar un sábado de cada dos durante siete horas seguidas -entre las 13.00 y las 20.00-, con los pequeños, de dos, cuatro y seis años. El juez recomienda que, hasta que no mejoren las relaciones familiares entre ambas partes, los padres no se queden en compañía de sus hijos cuando éstos estén con sus abuelos.
Además, también se establece en el fallo un régimen de visitas durante las vacaciones de verano, que en el año 2009 será de siete días -de los que cuatro podrán ser consecutivos-, y que a partir de 2010 serán de quince días -de ellos siete consecutivos-. El juez de Rubí también otorga dos días de las vacaciones de Semana Santa para que los abuelos estén con sus nietos, así como cuatro durante las vacaciones de Navidad.
Los abuelos paternos presentaron la demanda hace un año, cuando llevaban ya casi un año sin ver a sus nietos, tras enemistarse gravemente con su hijo y con su compañera. En el juicio, celebrado el pasado 5 de junio, no se presentó la Fiscalía, que no obstante elaboró un informe desfavorable a que se concediera un régimen de visitas a los abuelos.
Por su parte, el Servicio de Apoyo Técnico en el ámbito de la Familia del departamento de Justicia de la Generalidad, tras analizar los dos núcleos familiares, también se posicionó en contra de que se estableciera "ningún tipo de contacto" entre los abuelos y sus nietos, ya que el conflicto entre ambas familias podía dejar a los pequeños en una "situación vulnerable". En un informe, este servicio en el ámbito de la familia estima que existe una falta de vínculo emocional entre los abuelos y los nietos producto de su enfrentamiento, lo que "puede derivar en una instrumentalización de los menores para la resolución del conflicto".
Según este informe técnico, las dos partes enfrentadas tienen un modelo familiar diferenciado, ya que en el caso de los abuelos paternos se caracteriza por una estructura patriarcal, mientras que en los progenitores el núcleo familiar tiene una estructura matriarcal.
En opinión de los especialistas que elaboraron el informe, se ha generado un enfrentamiento entre las figuras que desarrollan el rol protagonista -el abuelo y la nuera-, que se sustentan en un carácter "rígido y dominante" que no ha permitido "flexibilizar sus posicionamientos", lo que ha provocado que se haya roto la vinculación familiar.
Fuente: elconfidencial.com
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