Los jueces de Marbella y Estepona deben decidir sobre custodia de menores sin informes psicológicos

Los juzgados de Primera Instancia de Marbella, Estepona y Ronda no tienen psicólogo desde finales del mes de junio. La Junta de Jueces remitió un oficio el pasado 12 de noviembre a la Consejería de Justicia de la Junta de Andalucía solicitando que restablezca la plaza. Los magistrados consideran "esencial" el servicio, especialmente por la emisión de informes periciales para decidir sobre la guarda y custodia de los menores en los casos de divorcio.


"Es una herramienta técnica fundamental para resolver un procedimiento en aquellos pleitos más complejos como la guardia y custodia y los regímenes de visitas. Las pensiones alimenticias, por ejemplo, son cuestiones matemáticas, pero decidir sobre el futuro de un menor es un tema más sensible", explica Ángel Sánchez, juez decano de Marbella.

Los magistrados de Primera Instancia de los tres partidos judiciales tienen ahora dos opciones: o resuelven sin el informe pericial psicológico o aplazan el procedimiento de Familia hasta que se restituya el servicio, si es que llega a restablecerse. La Consejería de Empleo era quien pagaba el sueldo a la psicóloga que ocupaba hasta hace unos meses la plaza, pero el servicio era fruto de un convenio entre la Consejería de Justicia y el Colegio de Psicólogos que afectaba a toda Andalucía Oriental.

Lo cierto es que el fin del acuerdo -confirmado por ambas partes aunque sin especificar el motivo- ha provocado la eliminación de la plaza de todos los psicólogos que ofrecían periciales gratuitas a los juzgados de Primera Instancia de media comunidad autónoma, salvo en las capitales de provincia, donde se ha mantenido el convenio. En Marbella, la psicóloga realizaba anualmente una media de 60 informes periciales, una cifra bastante elevada.

Próxima reunión

La reclamación de los jueces de Marbella, Estepona y Ronda no es la única que ha recibido la Junta en los últimos meses. El Colegio de Psicólogos de Málaga, que manifestó su predisposición para renovar el convenio, tenía prevista una reunión con la Dirección General de Instituciones y Cooperación con la Justicia, dependiente de la Administración autonómica, para abordar este problema, entre otros asuntos.

La Administración de Justicia aún mantiene un servicio de asistencia psicológica en Marbella, pero es exclusivo del Juzgado de Violencia sobre la Mujer. Actualmente, según la Consejería de Justicia, existen tres psicólogos que ofrecen este servicio en la capital malagueña y que podrían desplazarse a la provincia en caso de necesidad. Los jueces también pueden solicitar, si así lo consideran necesario, el servicio de asistencia técnica que ofrece una empresa privada externa, según la propia Consejería.

Desigualdades

La realidad, sin embargo, es distinta. Los jueces están decidiendo sin informe pericial psicológico o están aplazando los procedimientos de familia. Algunos ya están paralizados. La falta de periciales gratuitas ha dado lugar a las periciales de pago. Las parejas que se lo pueden permitir y desean que un psicólogo opine sobre la guarda y custodia de su hijo para presentarlo como prueba en un juzgado recurren al Colegio profesional de Málaga y pagan los servicios de un profesional, lo que origina una justicia de dos velocidades en función del poder adquisitivo del ciudadano.

La pericial de parte es, evidentemente, una prueba menos imparcial y, por tanto, menos efectiva para los jueces a la hora de decidir. La falta de esta plaza ha creado una doble desigualdad. No sólo económica, también territorial, ya que las parejas que se divorcian en la capital sí disponen de un equipo psicosocial que informa sobre la situación de los cónyuges y lo que es más beneficioso para el menor, frente a los divorciados de la provincia, que carecen de él.

No es la primera vez que la Junta de Jueces se pronuncia en relación a este tema. Sus peticiones sobre este servicio a la administración de Justicia han sido reiteradas. Primero, desde octubre de 2006, para que se cree una plaza con absoluta permanencia y estabilidad. Más tarde, para que se restituya el puesto. "Lo ideal sería contar con un equipo psicosocial, formado por un psicólogo y un trabajador social, pero mientras tanto necesitamos, al menos, al primero de ellos", apunta Sánchez.

La carencia de un psicólogo hace que la distancia con la capital sea aún mayor. Málaga cuenta con tres juzgados especializados en asuntos de Familia y equipos técnicos especiales (psicólogos, educadores, asistentes sociales) para abordar los problemas que se plantean, entre otros, con la custodia de los hijos en un proceso de separación. Los profesionales (abogados y jueces) coinciden en señalar que la falta de juzgados de Familia en la provincia está originando "divorcios de primera y segunda clase".

El magistrado de la capital José Luis Utrera apunta a la necesidad de implantar más órganos de este tipo en las zonas rurales para que los divorcios y las guardas y custodias "se efectúen en las mismas condiciones que en la capital".

Fuente: Alerta Digital